La tos también puede ser aguda o crónica, la tos aguda es la que aparece puntualmente por un catarro o una gripe y no dura más allá de 3 semanas. Se vuelve crónica cuando supera las 8 semanas, entonces debemos acudir al médico para que nos diga que podemos hacer.
Podemos encontrarnos con dos tipos de tos:
- Tos seca
- Tos productiva
- Tos seca
- Lo más fácil es tomar caramelos para humedecer la garganta y que el cosquilleo desaparezca, los de regaliz son especialmente eficaces, los de menta, si tenemos algo de congestión, nos ayudan a respirar mejor o los de miel y limón.
- Incrementar la humedad del aire. Si, por ejemplo, dormimos con el radiador encendido, colocar un recipiente con agua para que el ambiente no se reseque y se acentúe la tos. Con humificadores, tomando baños calientes (por el vapor del agua) hacen que las vías respiratorias esten permeables y la tos se alivie.
- Si cuando dormimos nos da un ataque de tos podemos levantarnos e ir hasta la ventana o el balcón, bien abrigados, el frescor de la noche suele calmar rápido la tos.
Otra alternativa que también podemos probar es "refrescar la dieta", bebiendo abundante agua y zumos, sopas frías, fruta y verduras.
- Tos productiva
- Tomar vahos de eucalipto, tomillo o raíz de jengibre.
- Tomar mucho líquido ayuda a diluír el moco y facilita la expectoración.
- En este caso podemos "calentar la dieta" consumiendo sopas calientes que contengan ajo y cebolla o jengibre. Las especias picantes como la pimienta ayudan a expectorar y son buenas para el sistema respiratorio pero en su justa medida, claro.
Consejos generales:
Es más que evidente que debemos dejar el tabaco de lado si tenemos tos.
Para aliviar la tos nocturna colocar media cebolla grande partida a la mitad en la mesita de noche es un remedio muy eficaz al igual que todos los remedios que contengan ajo y cebolla:
Hervir cebolla y ajo picado con 3 cucharadas de azúcar, dejar enfriar y tomar pequeñas cucharadas durante el día.
Hervir medio litro de leche con cebolla picada y miel. . La miel suaviza la garganta y junto con el limón son muy calmantes.
Tanto en niños como en adultos podemos colocar un paño caliente sobre el pecho impregnado en el caldo de una cebolla hervida, esto hace que los bronquios se dilaten, respiremos mejor y tosamos menos.
Si la tos empeora, tenemos dificultades para respirar, respiramos entrecortado o el moco que expulsamos tiene una coloración o olor extraños debemos acudir al médico de inmediato ya que podemos estar sufriendo una enfermedad grave de las vías respiratorias y necesitamos un tratamiento adecuado.
Esperamos que estos pequeños trucos os sirvan para aliviar vuestra tos. Un saludo :)
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