Cortes y rasguños en la piel

Los cortes y los rasguños forman parte de la vida cotidiana. Vamos a hablar de ellos para conocerlos un poco más.

Los cortes son heridas en la piel provocadas por objetos afilados.

Los rasguños son heridas superficiales que se producen cuando un objeto afilado.

¿Qué debería hacer si me hago un corte o rasguño?

Corta el sangrado apretando la herida con una toalla o un trapo suave y limpio. Si la herida no es muy profunda, debería dejar de sangrar al cabo de unos minutos. Entonces deberías lavarla con agua tibia y jabón suave. Un paño suave humedecido puede ayudar a eliminar toda la suciedad en caso de que el agua no la arrastre toda. Evita soplar la herida o rasguño, ya que puede causar la aparición de bacterias.

La mayoría de cortes, rasguños y rozaduras se curan sin necesidad de cuidados especiales. Para una protección adicional, se utiliza una pomada antibacteriana o un vendaje. Las pomadas antibacterianas matan a los gérmenes nocivos. Los vendajes impiden que la herida sufra golpes o roces y que entren nuevos gérmenes en su interior. 

¿Y si el corte no de deja de sangrar?

Si la herida es muy larga o profunda o si sus bordes están muy separados, es posible que tengan que ponerte puntos. A veces, tras la extracción de los puntos, se forma una cicatriz. Si no te tratas adecuadamente una herida profunda, te quedará más cicatriz.


También se ha de visitar al médico cuando la persona no se tenga la certeza de que esté vacunada contra el tétano. 

Si se ha clavado un pedazo de cristal u otro objeto, no trates de extraerlo de la herida. Puede estar evitando una hemorragia mayor y al sacarlo puede empeorar.

A veces, un corte, rasguño o rozadura empieza como una herida sin importancia, pero luego se acaba infectando. Las infecciones se producen cuando hay demasiados gérmenes para que los glóbulos blancos del cuerpo puedan hacerles frente. Las heridas infectadas pueden doler, ponerse rojas, inflamarse y contener pus, un líquido espeso de color amarillento o verdoso. Tal vez tengas que ir al médico para que te mande antibióticos para ayudarte a luchar contra la infección.

Pero en la mayoría de los casos, los cortes, rasguños y rozaduras se curan solos, gracias a la increíble capacidad autocurativa del cuerpo humano.